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La experiencia de Codemasters en los videojuegos de carreras data desde 1986 y, a lo largo de los años, la compañía británica ha experimentado con diversas propuestas, algunos exitosas, otras mediocres y unas tantas olvidables. Apostar por el género de carreras de automóviles parece una decisión segura y poco riesgosa, después de todo son millones los jugadores que gustan de vivir la velocidad y los grandes escenarios desde la comodidad de sus casas y en una consola o PC.
Sin embargo, el género ha ido avanzando hacia otras direcciones con 2 grandes exponentes que hallaron en la simulación el nicho adecuado para convertirse en leyenda de las pistas y por ahí existe otra franquicia que tomó los elementos de los juegos de carreras Arcade para dotarla de cantidades enormes de contenido y los más altos estándares de calidad. Mientras eso sucede, Codemasters se ha mantenido fiel a sus marcas tratando de que se abran camino y recientemente se lanzó Grid Legends, entrega que busca dar continuidad a una franquicia que se ha mantenido a la espera de dar ese golpe que la lleve a la cima y que hoy parece que tendrá que seguir como espectadora.
Video: Grid Legends - Trailer de lanzamiento
Grid inició a toda velocidad, se perdió en el camino y ahora busca un rumbo a seguir
La serie Grid surgió en la era de PlayStation 3 y Xbox 360 con una propuesta de tipo Arcade, un tanto casual y apelando al salto gráfico y visual que representó esa generación. Alejada de la idea de un mundo abierto, Codemasters busco ir de lleno a la acción en pista ofreciendo al jugador una gran cantidad de eventos que involucraban el manejo y dominio de todo tipo de vehículos, desde aquellos inspirados en los dragster, prototipos, 4 × 4, deportivos y vehículos de categoría Gran Turismo. Si bien la franquicia se posicionó como algo diferente y entretenido, pronto se vería opacada por el avance de las propuestas de simulación y una que otra de estilo Arcade; al mismo tiempo, Codemasters deambulaba entre el estilo casual o algo cercano al realismo en términos de conducción, lamentablemente, esto solo llevó a la pérdida de la identidad que se había presentado en el primer juego, Race Driver: Grid de 2008 y pese a un intento de reboot con Grid en 2019, la serie siguió sin despegar.
Este camino nos trajo a 2022 con Grid Legends, primer juego de la franquicia con Codemasters bajo el manto de Electronic Arts, en un intento por definir un camino a seguir. Esta vez, la propuesta se inclina hacia un modo historia que parece haber encontrado inspiración en producciones documentales deportivas como las de la serie 30 for 30 de ESPN o Drive to Survive de Netflix por lo que desde el inicio, Grid Legends nos recibe presumiendo con bombo y platillo su oferta para un solo jugador Driven to Glory donde encontramos el desarrollo de una historia cliché, tomas el papel de un piloto novato del equipo Seneca que busca hacer la hombrada ante los ricos, altaneros y en extremos competitivos miembros del equipo Ravenwest.
"El modo historia apela a los documentales deportivos de ESPN o Netflix"
Siguiendo la tendencia de estas propuesta narrativas en los juegos deportivos, el modo historia de Grid Legends funciona de distintas maneras pues no solo es una oferta para un solo jugador, también es un tutorial para que aprendas lo básico sobre la conducción de los distintos tipos de vehículos. A lo largo de 36 capítulos te encontrarás en distintos momentos de la temporada y la escalada de la rivalidad entre Seneca y Ravenwest.
Lamentablemente, más allá de la diversidad de capítulos que te permite conocer las pistas de día, noche y con distintos climas, así como diferentes vehículos, Driven to Glory pasa sin pena, ni gloria e incluso coquetea con lo ridículo y lo mediocre cuando participas en eventos que jamás se desarrollarían en la vida real en medio de una nevada, no es un simulador, pero se espera lo mínimo de coherencia con el automovilismo. Claro que es de destacar el formato tipo documental y el despliegue visual que en ocasiones te hace dudar si es un videojuego o una serie de TV, pero al final eso no sirve si el desarrollo de la historia es aburrido, imposible de generar interés y sólo te invita a presionar el botón para saltar la cinemática. Simplemente, es algo decepcionante.
Grid Legends va al grano: acción y velocidad en la pista
Luego de probar el modo historia de Grid Legends, quedas a merced de los demás modos de juego que básicamente son la versión extendida de lo que viviste en Driven to Glory, o sea una carrera profesional con la escudería que creas a tu gusto, eventos con condiciones específicas, torneos y una invitación a competir una y otra vez para desbloquear todo tipo de contenido, reunir créditos para comprar automóviles y poder pagar sus modificaciones. Grid Legends apela a una oferta puntual de carreras que hereda del reboot de 2019 y si bien es limitado respecto a lo que se ofrece en otras franquicias que compiten en la cima, no se puede negar que Codemasters va al grano e invita a probar todo su contenido mediante sesiones breves de juego.
"Visualmente, en Grid Legends obtienes un trabajo bueno, no espectacular"
A nivel visual, Grid Legends corre bien en Xbox Series S, consola desde la que se realiza esta reseña, y no experimenta bajones de cuadros por segundo. Los escenarios lucen bien y mucho más bajo ciertas condiciones como la noche, lluvia y nevadas, de hecho recomiendo que en este tipo de carreras se opte por la vista dentro del vehículo para añadir un toque de realismo y aumentar el reto con un parabrisas en constante golpeteo de lluvia o nieve. Visualmente, en Grid Legends obtienes un trabajo bueno, no espectacular, y quizá el único detalle molesto fue la generación de sombras en escenarios con árboles o edificios pues aparecen y desparecen de forma abrupta, detalle que se debería tomar en cuenta pues estamos en una nueva generación y eso ya no debería pasar.
Por otra parte, Grid Legends apuesta por una banda sonora de casa con temas épicos que emulan aquellos que fueron compuestos para resaltar las gestas heroicas del deporte y en general hay una buena ecualización para que el rugido de los motores y el rechinido de llantas no opaquen la música y viceversa.
Grid Legends: emoción que solo dura una vuelta
Como propuesta de tipo Arcade, la conducción es accesible y sencilla con una distribución de peso y reacción a la velocidad adecuada para el tipo de vehículo, claro que se puede optar por los ajustes, modificar ayudas y demás, pero si quiero realismo pues me voy a jugar un simulador, en este tipo de juegos quiero conducción sencilla, velocidad y acción.
En esencia Grid Legends ofrece eso y desde tus primeras carreras te darás cuenta que el control es simple, responsivo y nada complejo. Lamentablemente, el dominio del control llega de inmediato y esto te permite romper el juego de forma sorprendente pues aún en sus dificultades más altas bastará con aplicar de forma correcta el frenado y aceleración ideal en las curvas para tomar el primer lugar y ver como los demás rivales se pierden en el retrovisor hasta que solo estés recorriendo la pista como su estuvieras solo, algo más notorio en aquellos circuitos de campo, pues en los de ciudad el diseño estrecho y lo corto de la pista reduce la distancia entre vehículos pero aún así podrás sacar una ventaja considerable.
En Grid Legends, Codemasters apostó por el sistema patentado Némesis que se vio pro primera vez en el juego de 2019 y que en términos básicos crea una rivalidad dentro de la carrera entre tú y otro competidor controlado por la IA, lo cual hará que se concentre en dificultar tu avance, sin embargo, solo es cuestión de algunos movimientos atinados para rebasar y hacerlo morder el polvo.
Hasta el momento, y en el ámbito comercial, el desarrollo de videojuegos maneja la IA de una manera que realmente no es un sistema pensante en términos cibernéticos, sino que se trata de sistemas estadísticos aplicados a la experiencia de juego para que sucedan cosas cuando se cumplan ciertas condiciones. Precisamente, el arte de esto —y más en un videojuego deportivo es así— radica en lograr que suceda de forma sorpresiva y obedeciendo a las condiciones que tienen lugar en ese momento, siempre procurando que el jugador no lo note y lo perciba como una contingencia, como un accidente o una situación propia del deporte.
Durante las primeras vueltas en Grid Legends, me sorprendió encontrarme con accidentes o algunos choques adelante que me hicieron pensar que Codemasters estaba dando un paso hacia adelante, lamentablemente, la idea se vino abajo al ver que, de la nada, el automóvil que tenía enfrente trompicaba y se volcaba, así de abrupto, así de sin sentido y así de ridículo, vamos, ni siquiera hubo un frenado de emergencia que justificara la pérdida de control del automóvil, nada, solo el sistema de Grid Legends indicando de la manera más evidente que en ese momento tenía que suceder un accidente para que yo, en calidad de jugador, me sorprendiera con las contingencias que hay en las pistas.
Será para otra carrera, Codemasters; Grid Legends no es glorioso ni legendario
Al final, el sistema Némesis pasa de largo en Grid Legends y la IA de los vehículos solo te dará batalla en la primera vuelta o antes de que la cumplas pues lo más probable es que hayas rebasado a todo mundo para entonces llevándote en primer lugar y en puesto de honor al mayor de los aburrimientos.
Codemasters lleva más de 3 décadas en el negocio y en ocasiones ha sido capaz de desarrollar muy buenos videojuegos de carreras, pero la realidad es que sus propuestas se desenvuelven entre lo mediocre y lo malo. En el caso de Grid Legends, poco hay para resaltar pues en definitiva no es un título que destaque. Personalmente, no me gusta referirme a otras franquicias cuando hago una reseña, pero ya que se trata de una variante del género, no puede hacer sino preguntar, ¿qué tiene Grid Legends para aportar en una actualidad donde existe Forza Horizon? La respuesta es: ¡nada!
Grid Legends se queda corto en la mayoría de sus apartados y la sensación que deja su experiencia de juego es que la franquicia sigue perdida, en busca de un camino, y poco tiene qué hacer ante la oferta de títulos similares que se desenvuelven en la medianía así que esta carrera no tiene nada de gloriosa, ni de legendaria.
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