Desmond Miles está atrapado en el Animus y tendrá que encontrar más fragmentos de la memoria de sus antepasados para recuperar el control sobre su cuerpo. Para conseguirlo será necesario revivir las acciones de Ezio Auditore da Firenze, cuando se fijó la meta de revelar los secretos que su padre no pudo; seguirá los pasos de Altaïr ibn La-Ahad, que al parecer conoce la manera de darle un propósito a la Hermandad de Asesinos. En Assassin’s Creed: Revelations, convergen los tres protagonistas de una de las franquicias más importantes de esta generación, para darle cierre a un ciclo que inició en 2007.

Después de ver los créditos al principio del juego, nos queda clara la relevancia de la franquicia para Ubisoft, ya que están presentes los nombres de más de cinco de sus estudios repartidos a lo largo del mundo. Si bien es cierto que la diferencia con respecto al título anterior no es enorme, puedes tener la seguridad de que cuidaron cada uno de los elementos que componen la serie. Con esta información parece evidente la razón por la que la nueva entrega muestra el balance perfecto entre continuación de la saga y refinamiento de sus características para perfeccionarla y hacerla, en resumen, la más completa y mejor de todas.

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Un Ezio envejecido llega a Constantinopla, detalle que los habitantes de la ciudad nos recordarán cuando lo vean saltar y correr por las calles, ya que gritarán frases como “nada mal para tu edad”, “no te preocupes, viejo” o “¿cómo es posible que pueda hacer eso a su edad?” Nos duele un poco pensar que esta podría ser su última aparición, pero lo importante es que conserva sus habilidades como colgarse de las paredes para llegar a los puntos más altos de la capital y hacer un reconocimiento visual para que todo quede más claro en el mapa, que además se agregaron otras mecánicas y nuevos trucos.

Nuestro protagonista encuentra una Hermandad de Asesinos que está a sus órdenes y que tiene costumbres un poco diferentes a las de los asesinos italianos. Para empezar, la segunda cuchilla retráctil fue reemplazada por otra que tiene un gancho y es útil para escalar y darte un par de opciones más en batalla, es posible que no la uses, pues la opción de rematar a tus enemigos uno tras otro con solo un botón es muy socorrida y convierte a Ezio en un oponente letal que vuelve casi innecesaria cualquier otra habilidad.

A lo largo de la historia descubrimos que la gran diferencia entre los asesinos que conocíamos y los de Constantinopla se encuentra en el uso de bombas. Aquí podrás usar explosivos para distraer, incapacitar y hasta matar, así que difícilmente alguien pretenderá acercarse para pelear contigo.

La mayoría de las misiones y el mundo abierto de Brotherhood están de regreso, pero ahora en la ciudad más grande de Turquía. Seguirás comprando propiedades para ganar más dinero, reclutando asesinos, explorando tumbas secretas, mandando a tus aprendices en misiones especiales para subirlos de nivel y más, pero lo destacable es que las modificaciones nos permiten una experiencia de juego diferente.

Te daremos un ejemplo. Si tienes bajo control un territorio y haces notar tu presencia cometiendo actos ilegales frente a todos, los Templarios tratarán de retomarlo por la fuerza, lo que se llevará a cabo mediante un minijuego tipo defensa de la torre. El único problema en este sentido es que se siente completamente fuera de lugar y se convierte en una tarea tediosa que no querrás repetir, menos aún cuando te des cuenta de que lo único que tienes que hacer para recuperar tu territorio, es asesinar al capitán y escalar la torre una vez más.