Para ser una pequeña y, en apariencia inofensiva pelota rosa, Kirby ha dado pie a numerosas aventuras, y en celebración a sus 20 años de trayectoria, Nintendo decidió lanzar esta colección para Wii con algunos de sus mejores juegos, sin alteraciones ni cambios de su formato original. Más allá de relanzar en formato físico estos títulos que ya están disponibles en la Consola Virtual, el Gigante de Kyoto los envolvió en una presentación atractiva y colorida, saturada de personalidad, que además complementa la oferta con contenido adicional que sin duda fascinará a los fans.

El esférico guerrero podrá no ser tan popular como Mario Bros., y tal vez jamás alcance el nivel épico que brinda The Legend of Zelda, pero de todas sus franquicias hermanas, es quien más se atrevió a experimentar, siempre de manera radical, envolviéndonos en experiencias frescas, divertidas e innovadoras con cada propuesta, del pionero Tilt ‘n’ Tumble en los sensores de movimiento, pasando por los acertijos grupales de Mass Attack hasta la reinvención visual en Epic Yarn, y aunque ninguno de los 3 ejemplos forma parte de la antología, estamos frente a una recopilación que rinde grandes honores al legado de Kirby.

La selección de juegos dista de ser la ideal, aunque en todo caso los más aguerridos seguidores del regordete protagonista tardarían mucho en dar con los mejores 6 exponentes de la saga, pues al final cada persona tiene sus favoritos. Para no causar tanta polémica, Nintendo decidió incluir los más representativos de la evolución de Kirby, aquellos que muestran el refinamiento del personaje y el perfeccionamiento de la mecánica de juego.

Así, la lista se compone de Kirby’s Dream Land, Kirby’s Adventure, Kirby’s Dream Land 2, Kirby Super Star, Kirby’s Dream Land 3 y Kirby 64: The Crystal Shards, todos presentados sin incremento en el conteo de rosados polígonos ni características nuevas, igual a como fueron lanzados en su consola original. Si bien es respetable que se conserve el valor histórico, es lamentable que no se inyectara un toque de frescura, y no digamos al grado de exterminar la esencia del clásico, sino hacer la presentación más atractiva para las nuevas audiencias que no conocen a Kirby y podrían aprovechar la oportunidad para enamorarse de su adorable presencia.

Otro hecho desafortunado es que algunos de los exponentes, especialmente los que fueron creados para Game Boy, pecan de arcaicos, y a pesar de ofrecer una interesante sensación de nostalgia, duran muy poco o son realmente simples. Cualquiera que esté familiarizado con el control tardará de 1 a 2 horas en terminar Dream Land, y otro tanto en recorrer la secuela. Ambos brindan momentos de diversión, pero pueden volverse monótonos rápidamente.

Ante las fallas de las versiones para el primer portátil de Nintendo, Dream Land 3 equilibra la balanza a favor de la calidad, dado que muestra en pleno los talentos de Kirby durante su edad de oro. Y es que además de valerse de una estética que rinde tributo al trabajo del artista Claude Monet (legado que continuó Skyward Sword años después), permite combinar las habilidades que absorbe nuestro esférico personaje con talentos de 6 muy distintos aliados, dando margen a experimentar con los diversos resultados.

Volviendo a los lamentos, un gran error de Dream Collection es que no incluyó la versión remasterizada de Kirby Super Star, actualizada para Nintendo DS hace algunos años. Como ya expresamos, hay justificación para la ausencia de mejoras, pero no tiene caso recurrir a la primera edición cuando su forma reinventada es claramente superior. Dejando atrás el tropiezo, The Crystal Shard cierra la lista con broche de oro dado que es una de las aventuras de Kirby más extensas, nutrida con una gran variedad de escenarios y enemigos, y que su posibilidad de absorber 2 habilidades para combinarlas, pauta situaciones inesperadas. Dicho de otro modo, una aventura de plataformas que a la fecha, es difícil de superar.

No todo es nostalgia y recuerdos del pasado, para aquellos que buscan algo novedoso por su dinero, la recopilación cuenta con una sección de desafíos, extraídos de Kirby’s Return to Dreamland, donde te dan una arma específica y ponen como reto llegar al final mientras aniquilas todo en el camino. La modalidad no es tan extensa ni tan variada como para ameritar por sí misma la existencia de Dream Collection, pero es un buen añadido que impone un alto nivel de dificultad, demostrando que por más tierno que se vea, Kirby apela más a los auténticos veteranos del control, que a los niños o a las amas de casa.

A diferencia del pésimo tributo a Mario Bros. por sus 25 años de carrera, la colección de Kirby presenta como ofrenda una línea de tiempo interactiva en la que se puede observar la evolución del personaje de 1992 a 2012, conocer interesantes detalles de cada aventura, ubicar el lanzamiento de los juegos en relación con importantes momentos de la humanidad, o simplemente mirar un par de capítulos de la serie animada que estelarizó el esférico personaje durante más de 2 años.

Nintendo no es particularmente talentoso para conmemorar fechas importantes de sus franquicias, sólo este año decepcionó a los fans de Metroid y The Legend of Zelda por hacer algo irrelevante y ni se diga la terrible compilación de Mario Bros. en 2010. Kirby’s Dream Collection no compensa el daño, pero haciendo a un lado todo lo demás, es sin duda una obra de respeto y cariño, tanto por el personaje como por su legado. Siempre cabe espacio para realizar un mejor trabajo, pero en perspectiva, comparada con otras ediciones de aniversario, esta colección es ejemplar y digna de admiración.