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La muerte de Telltale Games nos hizo pensar que nunca volveríamos a ver juegos narrativos de grandes franquicias, pero el destino quería otra cosa. De las cenizas del estudio y con algunos de los creativos originales, Gearbox Québec revivió Tales From The Borderlands con una nueva entrega pero, ¿tiene la magia del juego de 2014? Tiene cierto carisma, pero en su mayoría se trata de un lanzamiento decepcionante.

New Tales from the Borderlands: Deluxe Edition ― disponible en Amazon México

• Nintendo Switch
• Xbox Series X
• Xbox One

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Otra experiencia narrativa

Lo primero que notarás en esta entrega es que el tiempo no ha pasado en balde. La diferencia entre New Tales Form The Borderlands y su antecesor es abismal gracias a una presentación completamente renovada que saca jugo del poder de los avances tecnológicos y de la experiencia que adquirió Gearbox con el paso del tiempo.

El objetivo de la dirección de arte y del apartado gráfico fue crear una aventura que pareciera sacada directamente de Borderlands 3 y triunfa en eso. Esta aventura narrativa bien podría pertenecer a la tercera entrega numerada de la serie de Gearbox. Incluso el trabajo de animación está cerca. Esto, además de un deleite para la pupila, permite que New Tales From the Borderlands sea una entrega visualmente consistente que forma parte del universo de la serie.

Esto último es clave porque se trata de un gran acierto del juego. Hay muchas cosas que se le pueden criticar a Borderlands, pero si algo hace bien, es pintarnos un mundo con muchísima personalidad y un montón de historias qué contar. Lo que vemos en New Tales From the Borderlands es una de ellas y se aleja de los Vault Hunters para mejor concentrarse en esas personas comunes y corrientes que sobreviven en las guerras corporativas.

Es en este contexto donde conocemos a nuestros 3 protagonistas: Anu, Octavio y Fran. Todos pueden entenderse como víctimas ―y hasta cierto grado, como cómplices― de los golpes que el corporativismo desmedido suelta sobre la gente común. Anu es una científica con baja autoestima que sueña con ser reconocida por su gran inteligencia; si bien asegura que quiere usar su mente para el bien, es una empleada de Atlas, compañía conocida por fabricar armas mortales y experimentar en animales. Por otro lado, está su hermano, Octavio: un chico de buen corazón, pero cabeza hueca, que vive en la miseria, pero cree que defendiendo el status quo y con un poco de mentalidad de tiburón podrá ser parte de la elite. La última y tercera estrella de esta historia es Fran, una mujer en silla flotante que trabaja arduamente todos los días para mantenerse e intentar levantar el dedo medio frente a las corporaciones.

No queremos entrar en muchos detalles de la historia porque el punto es que la conozcas por tu cuenta, pero podemos decir que la intención de Gearbox era entregar una comedia enfocada en sus personajes. Si bien no lo logra del todo ―hablaremos de eso un poco más adelante― reconocemos que la historia comienza bien; que sus personajes son entrañables y que hubo un par de ocasiones que soltamos una carcajada.

New Tales From the Borderlands terminó siendo una de las experiencias más agridulces del año. Es una situación casi deprimente porque todo comenzó con mucha promesa. La historia parecía verdaderamente genial como una sátira social con unas buenas risas. Además, estábamos ante unos personajes bien construidos y muy carismáticos. Pensamos que la recordaríamos por años.

Tristemente, cuando nuestra expectativa estaba por los cielos. Gearbox la tomó y arrojó contra el piso. Casi de golpe, la historia que nos fascinó se convirtió en una narrativa desgastada. De hecho, la terminamos sólo para poder traerte esta reseña.

Pero, ¿qué es lo que provocó este cambio tan abrupto? El principal problema es que New Tales From the Borderlands tiene un ritmo atropellado. Como dijimos, el juego empieza bien, pero luego el progreso se vuelve lento, con escenas que existen como puro relleno y una oportunidad para contar chistes malos.

Y es que, si hay un problema enorme con New Tales From the Borderlands, es que es incapaz de entender cuando fue demasiado. Varias secciones extienden de más su presencia al grado de volverse tediosas. Igual hay un montón de chistes que creen que insistiendo en ellos se volverán divertidos. Claro que eso nunca pasa y terminan dando pena ajena… de la peor manera.

Algo que hay que señalar sobre el humor es que muchos de sus chistes buenos se pierden en su localización al español ibérico. El trabajo es decente la mayoría del tiempo, pero muchas bromas son imposibles de transportar así como así y algunas de las mejores se pierden en la traducción.

Como si fuera poco, Gearbox nunca decidió hacia qué dirección llevaría la historia. Lo que parecía ser una interesante sátira del corporativismo, se convierte en un drama personal sobre el valor del individuo y las relaciones en un mundo en caos. ¡Claro que hay historias que pueden hacer ambas cosas y brillar! El detalle está en que para Gearbox fue imposible llevar ambos barcos a buen puerto. Con esto, la historia se siente hueca con muchas oportunidades desperdiciadas y un desarrollo de personajes poco interesante. Quizá no sería un problema tan grande si New Tales From the Borderlands brillara en otros elementos, pero no lo hace. Es un juego narrativo más con Quick Time Events simplones, tediosos y otros problemitas.

Lo que nos deja un sabor muy agridulce en New Tales From the Borderlands es que varios de sus apartados pudieron ser mucho más. Es evidente que en Gearbox Québec tuvieron buenas ideas, pero la ejecución deja mucho que desear. Por ejemplo, entre escenas cinematográficas y decisiones existen momentos en los que tomas el control de Anu, Octavio o Fran para explorar una zona. Se trata de una idea genial porque sacude el ritmo del juego para evitar que sientas que estás viendo una película interactiva y, de paso, coquetea con ideas de aventuras gráficas.

Tristemente, su implementación es gris y vacía, así que se convierten en secciones que parecen existir sólo porque se les ocurrió la idea, no porque supieran qué hacer con ella. En estos momentos únicamente caminarás por un área pequeña con objetos predeterminados con los que puedes interactuar para conseguir dineros o figuras de Pescacámaras, ambos irrelevantes porque son casi inútiles. Lo peor de todo es que carece de acertijos interesantes, por lo que se reducen a simplemente encontrar los objetos con los que debes interactuar para poder continuar la historia.

Dijimos que en las secciones de exploración puedes conseguir figuras de Pescacámaras pero, ¿qué rayos es eso? Es un minijuego con el que New Tales From the Borderlands rinde tributo a los Vault Hunters de entregas pasadas. Cuando nos enteramos de su existencia nos emocionamos pensando que tal vez sería un curioso minijuego en el que querríamos pasar horas, como Gwent en The Witcher: Wild Hunt.

¡Qué equivocados estábamos! Las peleas con figuras de Pescacámaras son simples combates donde sólo tienes que presionar un botón y esquivar los ataques rivales con Quick Time Events. Al final de la pelea puedes ejecutar una secuencia de botones que aparece en pantalla para realizar una especie de Fataility de Mortal Kombat y ya; eso es absolutamente todo lo que ofrece. ¡Ni siquiera se siente una diferencia importante entre las diferentes figuras!

De este modo, lo que pudo ser un minijuego interesante y un pretexto perfecto para quemar horas en New Tales From the Borderlands, se vuelve una tarea que simplemente querrás evitar. Cada vez que por accidente encontramos uno de los duelos escondidos por la historia, queríamos castigarnos por haber sido tan tontos como para interactuar con el objeto que nos llevó a eso.

New Tales From the Borderlands pudo ser un juego mucho mejor. Existe un potencial enorme en el universo Borderlands para explorar historias sobre todas esas personas que con su trabajo y sacrificio pagan las cuentas de la eterna avaricia de corporaciones como Atlas, Hyperion y Tediore. El potencial de este mundo para contar historias con las que nos identifiquemos para después darnos la ilusión de que los pequeños pueden ganar, aunque sea sólo una vez, se desperdició por completo.

Tristemente, New Tales From the Borderlands sólo cumple en concepto y, en ejecución, deja mucho que desear.

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