La vida actual es muy demandante. A veces el estrés provoca que las personas busquen escapar de él a cualquier precio; cada quien tiene su propia manera: unas prefieren salir a disfrutar un día de campo y otras, ejercitarse. Hay un sector más pequeño de la sociedad que gusta huir de la realidad por medio del entretenimiento digital, ya sea viendo una serie de televisión o una buena película, y un nicho aún menor lo hace de maneras que algunos considerarían extrañas, por ejemplo, construyendo una segunda vida en el mundo virtual de un videojuego.

Tomodachi Life es justamente eso y a pesar de que el género al que pertenece no es nuevo, cuenta con genialidades que lo hacen único. El juego te recibe de una manera amigable solicitándote que ingreses algunos datos antes de comenzar tu aventura, como la fecha, la hora y el nombre que tendrá tu isla, donde poco a poco crecerá tu ciudad. Le otorgué el nombre Fantasía, ya que de inmediato vino a mi mente la famosa serie de televisión Fantasy Island, de Gene Levitt.

La siguiente parte es de las más divertidas: la construcción de tu personaje. Existen varias maneras para crear un Mii: desde cero o transferir alguno desde la aplicación de 3DS llamada Mii Maker, que es el lugar donde se encuentran todos los que hayas inventado o transferido a tu consola. Posteriormente, se te pedirá que llenes otros campos para tu avatar; por ejemplo, seleccionar su estilo de voz (unas son muy graciosas) y otros elementos que determinarán su personalidad, como la rapidez con que se mueva, su manera de hablar, su expresividad y su actitud para que sea relajada o seria.

A continuación se te asignará un departamento. Es posible que al inicio te deprima verlo sin un mueble, pero también puede hacerte feliz el hecho de no haber tenido que buscarlo, encontrar un fiador, leer el contrato y pagar por adelantado 2 meses de renta, igual que en la vida real. Una vez que tu personaje llegue a su hogar, en la pantalla superior del 3DS aparecerá su estado (pues, como si se tratara de un RPG, éste irá subiendo de nivel), su comida favorita, lo que más odia, su pareja amorosa, su mejor amigo e incluso qué tan lleno está su estómago. Todos estos factores serán de vital importancia para tu Mii y deberás estar al pendiente de ellos para saber cuál actividad practicar.

Tu personaje te avisará, por medio de un cuadro de diálogo, que aparece por encima de su cabeza, que tiene hambre, por lo que deberás ir al supermercado a comprar algo de comer para él. El juego te otorga una pequeña cantidad de dinero inicial para que comiences con tus tareas y una vez que el Mii esté satisfecho, te dirá que se siente un poco solo, por lo que habrá que llevar a alguien más a vivir en el mismo edificio. Aquí comienza la diversión, ya que podrás invitar o crear cuantos Miis consideres conveniente; por otro lado, ten en cuenta que no querrás muchos en un inicio, ya que tu misión será resolver sus problemas, algo para lo que necesitarás mucho efectivo.

Cuando algún habitante del edificio tenga un dilema, en su ventana aparecerá un icono que te hará saber que requiere atención. Al visitarlo podrás comparar su personalidad con la de tu Mii, lo que será un factor determinante para saber si puede convertirse en su mejor amigo o en su peor enemigo; incluso si después de un tiempo hay química entre ambos, será posible que se convierta en su pareja y eventualmente se casen y tengan hijos. Dependiendo de qué tan favorablemente resuelvas cada problema obtendrás una recompensa, por ejemplo puntos de experiencia y dinero. Al subir de nivel elegirás un premio, sean nuevas frases o canciones que tu Mii tendrá a su disposición o muebles y aditamentos para su departamento.

En la parte central de la isla se encuentra el Town Hall (ayuntamiento), lugar donde podrás administrar elementos como los Mii registrados, los objetos que cada uno tenga en su poder y los álbumes en que podrás ver las listas de alimentos, ropa, sombreros, interiores y tesoros que has conseguido a lo largo del juego. También existen opciones para cambiar la fecha, la hora, el nombre de la isla y los ajustes de sonido; podrás leer un código QR para registrar un nuevo Mii y, más adelante, registrar a los hijos que tengan y llevar un diario de sus viajes.

Tomodachi Life está diseñado para jugarlo diariamente en sesiones de 10 a 20 minutos. Como supondrás, las actividades dependerán de la hora del día y aunque es posible cambiar esta información en cualquier momento, eso resta diversión porque sería el equivalente a hacer trampa. Con el paso de los días se abrirán nuevos eventos y zonas en la isla, por ejemplo, una tienda de ropa, un parque de diversiones, una cafetería (que sirve principalmente para conocer los chismes de los habitantes), un puerto donde lleguen Miis de otros jugadores si la consola está conectada a Internet, e incluso una playa, que resulta un lugar propicio para las declaraciones de amor.

El principal atractivo de Tomodachi Life es su sentido del humor, en especial para los que disfrutan el ingenio japonés. Sea una frase, una expresión o simplemente una acción exagerada de algún ciudadano, habrá muchos elementos que te provoquen una sonrisa, aun cuando hayas tenido un mal día en la escuela o en el trabajo. Este juego no es para todos debido a que requiere mucha atención y si no estás dispuesto a pasar por lo menos 20 minutos en él a diario, no podrás sacar el máximo provecho y te perderás las locuras que pueden ocurrir ahí.

El título quizá decepcione a quienes esperan algo similar a Animal Crossing, pues aunque pertenecen a la misma categoría y cuentan con elementos semejantes, siguen líneas distintas. Tomodachi Life es único en su género, ideal para aquellos que buscan una opción diferente y divertida en el género de simulación. La experiencia es tan personalizable que terminarás sintiéndolo como propio y, por lo mismo, tendrás una gran satisfacción al conseguir novedades en él. Si lo anterior te parece poco, ten presente que los desarrolladores lo actualizan constantemente para mantenerlo al día con eventos relacionados con la temporada del año, así que incluso después de jugarlo varios meses seguirás divirtiéndote.