Durante años, un jugador trabajó para hacer un servidor privado de World of Warcraft que reviviera la experiencia del MMO cuando sólo estaba disponible Burning Crusade. Poco tiempo después de lanzarlo, Blizzard lo contactó para dejar claro que podía haber consecuencias legales si el servidor continuaba operando.
El lanzamiento de Felmyst era muy anticipado por los fans de World of Warcraft puesto que ofrecía una versión de MMO sin los cambios de las expansiones más recientes. Así pues, cuando hizo su debut el pasado viernes, miles de jugadores se conectaron para jugar; sin embargo, 5 horas después sus servidores cerraron porque su creador recibió una carta de Mitchell Silberberg and Knupp LLP, firma legal que representa a Blizzard.
“Los derechos de autor de nuestros clientes son extremadamente valiosos y Blizzard se toma este tema seriamente. Como puedes notar, tu actividad causa daño serio e irreparable al valor y la integridad a los productos de nuestro cliente y su propiedad intelectual”, menciona la carta.
Si bien esto se veía venir (Blizzard nunca dio permiso para la creación de Felmyst), para Gummy, responsable de Felmyst, esta noticia fue como si le cayera un balde de agua helada. Lo anterior, ya que se trataba de un proyecto muy personal, el cual esperaba que, por su pequeña escala, no fuera notado.
“Este proyecto le dio un propósito a los últimos 4 de mi vida. Estaba en el proceso de mejorar la velocidad de subida del servidor cuando abrí la puerta [para recibir la carta] y básicamente me quede patidifuso. Durante horas revise si la firma legal era real, cheque si el número en el papel era el mismo que en su sitio web y los llamé para verificar la autenticidad”, explicó.
Más adelante, Gummy descartó mover el servidor a otro país donde pueda evitar problemas legales, puesto que no tiene los recursos para hacer algo así. Asimismo, reveló que ha considerado la posibilidad de liberar el código fuente de su trabajo, pero tiene que tener en cuenta las posibles repercusiones legales antes de tomar una decisión.
Recordemos que ésta no es la primera ocasión en la que Blizzard toma la decisión de cerrar unos servidores privados de World of Warcraft. El año pasado, la compañía puso punto final a la historia de Nostalrius, un popular servidor con un objetivo muy similar al de Felmyst. Poco después de esto, confesó que han discutido sobre los servidores clásicos, pero hasta ahora estás pláticas no han rendido frutos.
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