La organización para el trato ético de los animales, PETA, reaccionó ante la libertad que da Assassins Creed IV: Black Flag para cazar ballenas dentro del juego, calificando esto de vergonzoso.
Dispararles a ballenas con arpones y dejarlas para luchar por una hora o más antes de morir o ser cortadas en pedazos vivas, puede parecer algo salido de libros de historia, pero es una industria sangrienta que todavía opera hoy ante la condena internacional y es vergonzoso que cualquier juego lo glorifique.
Assassins Creed IV: Black Flag estará situado en la edad dorada de la piratería a comienzos del siglo XVIII, con 40% de las misiones ocurriendo en altamar, es por eso que existe la posibilidad de cazar animales marítimos e incluso explorar en las profundidades en busca de tesoros.
No es la primera vez que PETA se queja de un juego. En el pasado, el órgano atacó a Pokémon, alegando que el trato que se le daba a las criaturas protagónicas de dicha serie podría considerarse maltrato animal, y a Mario por enviar el mensaje de que está bien usar pieles.
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