Con todo y el impulso de Diablo III, el segundo reporte financiero trimestral de Activision durante el ejercicio fiscal 2012 fue negativo, esto debido a una caída en las ventas digitales y de catálogo de la franquicia Call of Duty, y a una reducción sostenida en el número de suscriptores de World of Warcraft, mismo que hoy se ubica en su nivel más bajo desde 2007: 9 millones.
Así las cosas, la distribuidora arrojó una baja en su recaudación semestral de $2.3 mil millones de dólares durante el mismo lapso del año pasado (abril septiembre) a $2.1 mil millones de dólares este año, lo que representa un retroceso de 6.8%. A nivel trimestral (julio septiembre) hubo un repunte de 5.2% pero, según expertos, esto es atribuible al tipo de cambio y no a un mejor rendimiento.
En cuanto a ganancias, también hubo malas noticias. Semestralmente, estas cayeron de mil millones de dólares a $721 millones de dólares, y a nivel trimestral de $417 MDD a $223 MDD.
Como mencionamos al inicio, Activision echó la culpa de esto a Call of Duty y a World of Warcraft, títulos que están generando menos ingresos, lo que quizás en el caso de World of Warcraft sea entendible considerando su larga vida, pero preocupante cuando pensamos que el servicio para fanáticos de Call of Duty, Elite, se suponía que iba a mantener el flujo de dinero constante todo el año.
Aún así, Activision tiene fe en que la expansión Mists of Pandaria, Call of Duty: Black Ops II y Skylanders: Giants, les ayudarán a revertir esta inercia.
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