Yves Guillemot, director general de Ubisoft, declaró como parte de una entrevista difundida hoy que los juegos simples y rápidos, mejor conocidos como casuales, eventualmente superarán a su contraparte hardcore por una simple y sencilla razón: hay más gente interesada en comprar lo casual, sostuvo.
Por más preocupante que esto pueda parecer, basta con echar un vistazo al caso Wii para corroborar la veracidad que yace detrás de este pronóstico. La plataforma del gigante japonés está plagada de títulos familiares y, hasta cierto punto, efímeros, compuestos por minijuegos, no obstante, supera a sus competidores por cerca de 30 millones de unidades.
Pese a lo claros que resultan estos antecedentes, Guillemot se dijo sorprendido por el éxito de Just Dance (6 millones de unidades vendidas), lo que demostró que mucha gente realmente comprará enormes cantidades cuando les llevas un juego en el que realmente están interesados.
A la luz de este nuevo entorno creado por Nintendo y Apple, el también fundador de Ubisoft, expresó su deseo de que las consolas del futuro permitan una mayor interacción con la gente y soporten títulos versátiles cuyo contenido se adapte al tiempo y tipo de personas que deseen jugarlos.
Así que el software tendrá que ser muy diferente para que todos puedan jugar y tomar de los juegos sólo el pedazo que quieran, concluyó, pero no podríamos estar más en desacuerdo.
Lo que Guillemot propone, básicamente, es expandir el modelo DLC, segmentando completamente los juegos y distribuyéndolos por partes "para que cada quien juegue el pedazo que quiera". La idea no sólo resulta un tanto absurda, sino también insultante para quienes dedican su vida a la concepción de experiencias completas y complejas, como Fallout 3 o Mass Effect.
El que haya una buena cantidad de gente que, mientras espera el transporte, juegue Angry Birds o FarmVille, no necesariamente significa que esas mismas personas tendrán el interés por descargar un tercio de Assassin's Creed o Grand Theft Auto V, después de todo, los jugadores no tienen el mismo perfil, ni los mismos gustos. Pero al final del día, la mente de un empresario tiene un sólo objetivo en la mente: ganancias, eso queda claro, y más Ubisoft, cuyo año no ha sido precisamente bueno en términos financieros o de lanzamientos.
Comentarios
Mejores
Nuevos