Hace unos días hablábamos acerca de la inesperada caída en las acciones bursátiles de Nintendo, culpa del posible precio de la consola Wii U recién anunciada durante el E3 2011, o por la confusión pública respecto a las funciones y características de esta nueva plataforma.
Satoru Iwata, presidente de la compañía con sede en Osaka, Japón, considera muy extraña la creciente desconfianza en ojos de analistas financieros y la opinión pública, tras el anuncio del Wii U. Admite que durante la presentación de Nintendo en la Electronic Entertainment Expo, se debió hacer un mayor esfuerzo en explicar el funcionamiento del Wii U. No cometimos errores, pero debí mostrar una imagen de la consola y después hablar del control, afirma el directivo, en defensa a las acusaciones de su mala presentación del dispositivo, aunque asegura que eso no cambia su convicción, pues la consola no es drásticamente diferente a la competencia, el Wii U es acerca del control la consola será casi invisible,.
Y es que durante la convención, el señor Iwata reafirma que las impresiones de los asistentes a E3 y la reacción de la gente en la conferencia, no van de acuerdo con las tendencias en la bolsa de valores. Al final es fácil tener una falsa impresión de que sólo se trata de una consola y su tableta. Las personas que asistieron a la presentación y probaron el Wii U entendieron muy bien las posibilidades que ofrece, pero la gente que ni siquiera la ha tenido en sus manos, encontrará difícil de creer que el control cambiará la forma de jugar, agrega.
El problema que enfrenta Nintendo es precisamente ese, tenga o no razón la compañía de que su idea cambiará el formato de la industria, debe asegurarse que cada cliente potencial pueda probar la consola. A diferencia del Wii, cuyo exitoso mensaje fue más claro con sus controles de sensor de movimiento, Wii U tiene un concepto más abstracto y potencialmente más difícil de comercializar, justo lo que temen los analistas.
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