Guía: Supervisa lo que juegan tus hijos

Monitorea cuáles juegos puede jugar tu hijo y por cuánto tiempo


Ser padre realmente no es tarea fácil, y menos con todo
el contenido que puede llegar a las manos de los niños; definitivamente no
deseas que tu hijo esté expuesto a cierto tipo de juegos o que deje a un lado
sus deberes escolares por jugar durante demasiado tiempo.

Antes que nada, hay que dejar claro que los
videojuegos no son malos, al contrario, son muy divertidos y pueden ayudar a
niños y  jóvenes a adquirir muchas
habilidades, como resolver problemas de forma autónoma, fortalecer su
autoestima y su capacidad de comunicación e incluso a aprender algún idioma
extranjero. Sin embargo, en la vida todas las actividades deben realizarse con moderación y de acuerdo con la edad
y madurez de cada persona.





Lo primero que debes tener en cuenta como padre, es el
tipo de juegos que compras para tu pequeño. Cuando empiece a jugar un título nuevo
o lo lleves a comprarlo, recuerda revisar la caja en busca de las
clasificaciones que la ESRB ha colocado en las portadas y partes traseras del
empaque; si quieres conocer un poco más al respecto, puedes revisar
nuestro artículo dedicado a ellas dando clic aquí.

Antes de adentrarnos en las funciones de cada consola, te
daremos algunos consejos que te ayudarán a dormir tranquilo, al saber
que tu hijo está disfrutando de los juegos en un ambiente seguro.





Involúcrate.
Tal
vez los videojuegos no sean lo tuyo, pero mantenerte al pendiente de lo que
hace tu hijo es algo muy importante. Habla con él, comenten cuáles son sus títulos favoritos y tal vez convendría que le pidieras que te enseñe un poco de ellos, incluso podría gustarte alguno; piensa que al invertir un poco de tu tiempo para compartir sus
actividades preferidas, también estrechas tu lazo afectivo con él.

Bloquea
a jugadores inapropiados. Afortunadamente, los servicios de juego
en línea te permiten bloquear las comunicaciones con otros usuarios; así que si
escuchas que alguien dice cosas que no debería o intenta contactar a tu hijo,
puedes bloquear las comunicaciones con esa persona o con el servicio en
general. También muéstrale cómo hacerlo, es importante que sepa que no debe tolerar
ningún tipo de abuso o insulto, pues merece respeto.

Control
de información. Algo que debe aprender tu pequeño, es abstenerse de compartir información personal con extraños, como su
dirección, los datos de su escuela u otras referencias personales. Relacionarse por
medio del juego con otras personas estimulará en gran medida su desarrollo,
pero le ayudará mucho aprender a poner límites (esto también aplica fuera de
los videojuegos).

Mantente
informado. Trata de establecer un diálogo con tu hijo o hija y al
mismo tiempo infórmate de qué tipo de  juegos o redes sociales visita o utiliza. Es
recomendable que mantengas la computadora y consolas en un área común del hogar,
así podrás escuchar o ver las actividades que realice, en forma discreta
y respetando su momento de esparcimiento.

Cuentas
individuales. Si tienes dos hijos de diferentes edades o si
disfrutas de juegos que no son aptos para tu pequeños, crea cuentas separadas para cada integrante de la
familia y protégelas con contraseñas particulares; afortunadamente, la mayoría de
los servicios poseen está opción.

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